La pequeña Lunita fue encontrada dejandose morir, tenía los ojitos llenos de pus y totalmente cerrados.
Como no podía ver, dejó de comer y no sabía dónde refugiarse.
Un día ya no pudo más y se quedó tumbada a pleno sol, estaba medio muerta,
pero un ángel se cruzó en su camino y la rescató.
Adjuntamos fotos de dos días después del rescate, después de haberle limpiado los ojitos y estar en tratamiento.
Aún así, la pobre seguía sin poder ver...
Ahora Lunita está recuperada y es una gatita normal y feliz.
Solo tiene dos mesecitos y ya ha estado al borde de la muerte.
¿Quieres adoptarla y ayudarla a olvidar todo lo que ha pasado?
Escríbenos! Lunita te espera
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